Déjame olvidarme de los problemas por un minuto, dos, quizá tres...Pero ayudame a olvidarme de todos mis pensamientos, de mis recuerdos, de todo, absolutamente todo lo que he vivido. Necesito ser feliz por unos instantes, volver a saborear la alegría para recordar su dulce sabor. Ya he olvidado como era todo eso, la euforia que resultaba amar a alguien y no tener nunca dudas, porque no estoy hecha para esto, no estoy hecha para cosas complicadas. Tengo que tomar la decisión, la decisión de tener la certeza de a quién debo escoger, esa persona la cual llenará mi vida de ese sentimiento que lo tiene todo, felicidad, alegría, euforia...eso es, es AMOR.
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